Sus orígenes

Se desconoce el origen de la Chinchilla de Montearagón y su topónimo. El nombre Cincilia, que deriva del latín saltus y significa «sal», se le dio a la zona en el pasado. Cincilia es un término celta que significa «ciudad de los muertos cortos «, y también recibió los nombres de Teichea, Saltigis, Cinxella y Sintila.

Algunos autores afirman que estos nombres derivan de los reyes Suintila o Chintila, a uno de los cuales Chinchilla debió su colonización.

El hecho de que Montearagón (o Monte Aragón) esté situado en la zona que durante muchos años se conoció como «Mancha de Aragón» o » Arago», palabra griega que denotaba el abundante esparto en esa región, es lo que le dio nombre a la zona en el siglo XVI. No obstante, la tradición atribuye la fundación de Chinchilla a Hércules el Grande, a quien se atribuye la colocación de las primeras piedras en el lugar hacia el siglo VII antes de Cristo.

Es evidente que tienen raíces antiguas a partir de los numerosos hallazgos arqueológicos de la zona , incluidos los de la Vía Augusta de la época romana, que atestiguan el protagonismo de Chinchilla de Montearagón como un importante cruce de caminos.

Chinchilla de Montearagón ostentó el título de ciudad mucho antes que Alcaraz y Villena, estando bajo la gobernación del Marquesado de Villena en tiempo de los Reyes Católicos.